SOLO TÚ
Cuando estoy contigo mi alma se enciende y la felicidad me
recorre por las venas.
Los nervios recorren todo mi cuerpo hasta las yemas de mis
dedos, es una sensación poco común.
Al mirarte es difícil mirar hacia otro lado. Observar tus
gestos se me hacen entretenidos y verte hace que no quiera irme del sitio.
Estar momentos cortos contigo es el regalo más maravilloso
que tengo. No se si será tu habla con un acento tanto diferente, tu mirada entrecortada
y sin un destino fijo o un agradecimiento salido de tu boca que causa euforia,
realmente no sé, a veces entran ganas de gritar te quiero, en la cima más alta
de la ciudad, donde el ruido pueda fluir sin ningún esfuerzo.
Despertarme en medio de la noche mirar hacia la ventana y
observar en el cielo el conjunto de estrellas e intentar unir cada punto con el
nombre tuyo.
Escuchar una canción con una historia parecida y que no
pueda parar de recordar y recordar. Para mí, aunque suene brusco es un chute de
felicidad.
De verdad no hay sensación mas bonita que lo supere como
esta.
Pero cuando me despido de ti y al girarme aprieto el puño
para calmar mi tristeza al irme.
Creo que esa es la única sensación más desagradable de todo
esto.